No es para nadie un secreto los tremendos daños que han provocado las inundaciones en el departamento del Beni, Norte de La Paz y varios municipios del valle alto y del trópico cochabambino. Decenas de muertos y desaparecidos, cientos miles de viviendas perdidas, pueblos enteros anegados y contaminados con aguas servidas, 80 mil cabezas de ganado muertas, y decenas de miles de hectáreas de cultivos desaparecidas. Un genuino desastre humanitario. Nuestros hermanos trabajadores del Beni de LPZ, de CBba, y de todo el país necesitan urgente la solidaridad para aliviar las penurias provocadas por las lluvias, pero también por la falta de previsión de los gobernadores (de la derecha en el Beni y del MAS en LPZ y Cbba) así como del gobierno central. No es ningún secreto para nadie que todos los años hay que afrontar estos riesgos ¿Qué han hecho para prevenir o morigerar esta crisis humanitaria? NADA.
Peor aun, luego de que las noticias, y el mismo gobierno informa sobre este desastre, se ha desatado una tremenda pelea mediática entre el gobierno y la oposición sobre si declarar o no desastre departamental al Beni. En esta pelea esconden su voluntad de administrar los recursos que podrían llegar del exterior y que podrían ser usados en la campaña electoral ya en marcha. El MAS tiene el monopolio de la ayuda a los damnificados y por lo tanto el monopolio de la publicidad en este año electoral. La derecha del gobernador Lenz busca que esos recursos y esa propaganda “humanitaria” sean aprovechados por los cívicos. Entre tanto la escasez de helicópteros de centros de alojamiento y de medidas de protección a decenas de miles de víctimas sigue llegando en cuenta gotas.
Hay que exigir que los sindicatos y organizaciones populares, la formación de una comisión nacional elegida en asambleas formada en primer lugar por los damnificados que son quienes conocen las urgentes necesidades de los afectados, los trabajadores y el pueblo pobre quienes son los que están brindando desinteresadamente su apoyo, para controlar y administrar los recursos necesarios para hacer frente a este desastre. El gobierno y Evo Morales tiene la obligación de declarar desastre departamental al Beni y permitir que lleguen los recursos de ayuda nacional e internacional. La única forma de que los damnificados no puedan ser usados como rehenes en esta disputa electoral entre el MAS y la derecha es mediante una comisión nacional independiente formada por los trabajadores para garantizar la ayuda.
Liga Obrera Revolucionaria - Cuarta Internacional (LORCI)