P.O. ¿Qué opinión te merece la situación nacional, y qué pasará ahora con el cuarto intermedio movilizado que resolvió el ampliado de Juntas Vecinales?
J.A. Esta es una crisis social, imposible de solucionar, especialmente con el plan del FMI y las transnacionales. Si no se recupera la propiedad de los hidrocarburos es imposible atender ninguna demanda social.
Aguas del Illimani (AISA) se debe ir ya mismo, ahora el ampliado definió un cuarto intermedio, pero eso es solo postergar la crisis. Esto se debió a que muchos dirigentes se sintieron presionados por la publicidad de los medios para confundir, diciendo que “sin presidente no hay con quien solucionar”, “a quién pedirle las demandas”, eso se reflejó en algunos dirigentes, pero no podemos negar que también hay infiltrados de los partidos MNR, MIR, NFR, que solo hablan para confundir y paralizar la movilización. Pero bien, no se definieron tiempos, yo estimo que este cuarto intermedio va durar muy poco, pero depende del Comité Ejecutivo.
P.O. ¿Crees que se necesita una instancia de coordinación?
J.A. Desde hace tiempo que se planteó un ente que coordine las demandas sobre el ALCA, Hidrocarburos, AISA, Maestros y Campesinos, lo malo es que esto no pasa del discurso y el dirigente no es capaz de plasmar la idea. Se tiene que trabajar a nivel de base con los vecinos.
P.O. ¿Qué perspectiva ves en el movimiento alteño?
J.A. Lo importante es fortalecer el movimiento y coordinar con otros sectores. Por el momento el gobierno consiguió su cometido gracias a su trampa y chantaje. Los dirigentes de nuestro distrito y otro más, pensamos y votamos por que no se suspenda el bloqueo. Esto porque había expectativa a nivel nacional en El Alto, nos tomaban como referente político, indicaba el camino a seguir, por eso yo siento que traicionamos al conjunto del país movilizado. No conseguimos que AISA se vaya, por lo tanto salimos de esta lucha derrotados.
El paro ya comenzó debilitado con una medida muy tibia como es la huelga de hambre, que son actitudes pasivas, luego se fortalece gracias al bloqueo, pero sólo en apariencia. La dirigencia no es inocente de este fracaso, ahora está en duda en los barrios, ya que nos dirigió por segunda vez al fracaso. Así que tendrá que hacer mucho por recomponerse si desea continuar a la cabeza.
Los presidentes de zonas debemos organizarnos de otra forma, que no exista una dirigencia separada de sus bases, que las movilizaciones sean masivas para que esta vez podamos dirigirnos al triunfo.
Este gobierno no es de los bolivianos, es de las transnacionales, por lo tanto todas sus leyes y decretos ya sabemos a quién favorecen. Lo de AISA seguro que va ser auditoría tras auditoría y más engaños. El próximo embate será con bloqueos, barricadas y enfrentamientos.